La salud en el deporte es indispensable para cada uno de los
atletas. En el fútbol argentino hay clubes que tienen consultorios médicos de lujo.
Una de las ramas menos tratadas es la odontología. En el club atlético Tigre,
el odontólogo Gustavo Furman (M.P 42043) forma parte del cuerpo técnico y
atiende tanto a los jugadores de Primera División como a todas las inferiores.
El odontólogo deportivo del club atlético Tigre, Gustavo
Furman (M.P 42043) trabaja en el club de la zona norte desde el año 2009.
Además, integró el cuerpo médico del
Mundial de Rugby Sevens 2001.
DiarioVeloz.com habló en exclusiva con él y cuenta cómo es
trabajar con jugadores, cómo se trata esta rama de la medicina en otros clubes
y de qué forma educa a los chicos en las inferiores.
"Tigre es el primer equipo argentino en incorporar a un
odontólogo permanente en su cuerpo técnico. Otros clubes tienen un consultorio
odontológico muy completo en el estadio que realizan un trabajo similar al
nuestro pero no es igual", sostiene Furman.
¿Cómo es el día a día con los jugadores y cuál es la lesión
típica que tienen?, le consultamos al odontólogo: "Yo estoy en los
entrenamientos una o dos veces por semana y en los partidos, tanto de local y
visitante, para resolver cualquier problemática. Las lesiones típicas de los
jugadores son las caries y las enfermedades periodontales en las que se hace un
trabajo de prevención además de las traumáticas por los golpes en la cara y
boca".
El médico Furman se recibió en la UBA en el año 1981 y tiene la
experiencia necesaria para tratar casos. Muchos de los juveniles que llegan a
Tigre tienen distintos problemas físicos. Le consultamos cómo es tratar con los
chicos: "Con chicos de inferiores se les enseña técnicas de cepillado y en
el consultorio se hacen selladores de puntos y fisuras en los molares
permanentes. Si aparece una lesión crónica se lleva a cabo el tratamiento de
conducto como con cualquier paciente. Al odontólogo la gente no va corriendo, y
mucho menos el jugador de fútbol. Por lo tanto, al trabajar a diario con ellos
originamos un mecanismo de confianza. Somos compañeros de trabajo y esto
favorece muchísimo al trato".
Muchas veces vemos jugadores con sangre en la boca por
distintos enfrentamientos, Gustavo Furman nos cuenta casos en pleno partido que
tuvo que tratar: "Casos que tuviera que interferir de manera inmediata fue
por ejemplo con Mariano Echeverría que sufrió un codazo de un adversario. Se le
realizó una maniobra en el entretiempo, el jugador pudo continuar y luego nos
dio el gol del triunfo. Hace poco Castiglione jugando contra San Martín de San
Juan recibió un fuerte codazo. Se colocó la pieza dentaria en el momento y el
jugador se fue normalmente a su casa. Y así varios casos distintos."
Por Luciano Fryszberg-DiarioVeloz.com
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